Aquella noche de lluvia
nos conocimos,
tú me miraste a los ojos,
a través de la fina cortina
de agua que nos invadía,
me ofreciste tu paraguas
y tu dulce compañía.
Me cogiste del brazo
y yo que feliz me sentía,
la lluvia nos mojaba
para nosotros era brisa,
me protegías con tu cuerpo
y al llegar al portal de casa,
con tus labios húmedos y
tibios me besaste en los
míos.
Las nubes seguían arriba
parecían de algodón,
con su suave caricia convertida
en fina lluvia, que sobre
nuestros rostros parecían
lagrimas de felicidad.
Y aquel beso fue.
como una dulce caricia
la humedad de la lluvia,
se fundió con la de
nuestras bocas, que
besando y besando.
casi me volviste loca.
Que sabor más rico
tenia tu boca, amado
L… aquel beso de
lluvia, de humedad
de tu boca, no lo
olvidare.
Desde aquella noche
de lluvia y de besos
me sentí una diosa,
entre tus brazos.
adorada por tu amor,
yo te amare siempre,
la lluvia nos unió.
Amado L… eres,
ese amor que se sueña,
y que solo por milagro de amor,
se hace realidad.
Rosario Ayllon.
Poetisa.
Nunca habÃa leeido algo que me calara tan hondo el alma,escribes muy bello,además me identifico mucho con tu poema SIGE ASI!!!!!!!!!!!!!!!!!!