Me gusta cuando callas porque estás como para
mojar pan y me oyes desde lejos y mis manos no te
tocan tus lindos senos
.
Parece que los ojos se te hubieran volado
cuando me acerqué y te introducí esa cosa
y luego te la introducí en la boca.
Como esa cosa están llenas de un liquido elemento que emerge cuando se llena el alma mía.
Mariposa te sueño, si quieres quitame mi alma,
y te pareces a la palabra lujuría.
Me gusta cuando callas y estás como para mojar pan.
Y estás gimiendo de placer, mariposa yo te arrullo.
Y te introduzco esa cosa una y otra vez y te decía:
ay, mi amor, ya me quiero correr.
Déjame que te haga el amor sin silencio
dejame hacerte mio, sólo un simple polvillo.
Eres como las de la noche, abierta y mojada.
Tu silencio me aturde, tan lejano y sencillo.
Me gustas cuando callas porque estás como para mojar pan.
Distante y dolorosa se que nunca serás, mi amor.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto
de no poderte hacer el amor antes de quedar muerto.