Despierto cada mañana y en mi almohada veo dibujada las veredas de tus cabellos,
En el aire esta tu aroma, en el sol tu piel,
en la suave brisa tus caricias que se perdieron al pasar los años, sin pensarlo te ame demasiado, sin esperarlo te extraño tanto ¿Qué no daría por besarte de nuevo? Mas tus labios se han convertido en el veneno que asesina en un suspiro a mi alma.
Me resigne a perderte e inconcientemente te amaba mas, me resigne a olvidarte pero no encontraba una solución, aún palpitaba mi corazón, cada vez que te acercabas y sonreías frente a mí,pero todo fue una mentira, me duele ser el tonto que siempre lo supo, decías que me amabas ¿Cómo no me di cuenta? Tu boca era la colmena que guardaba con delicada paciencia la miel de tus mentiras, me resigne a perderte y en un segundo te amaba más.
Ahora no hay vuelta hacia atrás, aunque la tempestad me doblegue, aunque tu ausencia congele mi alma, aunque la soledad queme mi piel, me dedicare a perderte ¡Por que el dolor duele más cuando se le recuerda! ¡Por que el amor crece más cuando se trata de olvidar! Me dedicare a perderte cada segundo que se pase volando por mis pupilas.
¿Me amaste en verdad?
La respuesta me la guardare en los bolsillos y cuando te busque de nuevo, me acordare de no recordarte, y me dedicare a perderte desahogándome con los versos que jamás recibirás… que jamás leerás…
Atten. Hermes