La soledad que puedes haber vivido
Y que nadie se imagina nadie sólo tú.
Sabe que en el silencio azulado de otoño.
En la oscuridad temprana de la tarde.
Ha venido la lluvia, que de arrastre
Lleva las hojas de mi viaje.
Los recuerdos van llenando, el espacio de tú esencia maravillosa,
La vida en su tristeza, parecerá no avanzar.
Como quisiera que también a ti te llueva, y juntarnos en tan sólo una gota.
Y con el caer de la lluvia juntos poder caminar,
Juntos por el azulado otoño, como los últimos románticos de este mundo sin amor.
La vida en su tristeza pareciera no avanzar, nos amarra a las apegos
No reconocemos la vida como un regalo,
No vemos la conexión que tiene con el espíritu.
Quiero sentir con alegría la lluvia del invierno,
Igual como vibro al sentir el calor del sol que envuelve timidamente mi frágil cuerpo
Quisiera que te lleves de mí lo mejor,
Como las arboledas humildes que dan la sombra
Que protegen de vientos llenos de vida,
Mí naturaleza, que pronto no quedará más que un camino, hecho por mi viaje por un sendero de hojas muertas.
Que difícil es descubrir la serenidad y la tranquilidad en un mundo imposible de entender, que el dolor que hemos vivido, los problemas que hemos experimentado no nos da la fuerza de caminar por la vida es como vivir sobreviviendo y no tener la fuerza de caminar por el sendero.
Genito/vevi0/Otoño/2010