Has dejado una huella implacable en mí ser,
Has dejado plasmado tu nombre en mi roto corazón,
Has andado por mi sendero, sin querer has estado en mis secretos, en mis sueños, te he declarado tantas veces mi dueño.
Te he amado sin razón, con tanta devoción, que hasta
Me avergüenzo, a veces de haber perdido tanto la razón,
He soñado, que tu me perteneces, que somos uno, que la vida compartiremos hasta el fin,
Más despierto y caigo en la cuenta de que esto como, todo esta llegando a su fin.
He comprendido, que tú no eres de nadie, que eres un hombre libre, y así te gusta vivir,
Sin ataduras, con libertad, para tomar y dejar lo que se te antoja, he andado en una cuerda floja por ti, pero ahora, esa cuerda del destino, ha llegado al final del camino.
Muchas veces te he dicho, que siempre te voy a amar,
Y eso es lo único cierto que hay en mi,
El amor puro y sincero que siento por ti.
No quiero decir adiós, sino quiero decir simplemente, que ya comprendo, lo que me ha tomado tanto tiempo comprender…
No eres mió, no lo vas a ser nunca, no me amas, ni me amaras nunca, como yo a ti mi amor, mi mente lo acepta, mas mi corazón no quiere comprenderlo, dejemos que el tiempo, y un poco de distancia me ayude a encontrar un corazón donde pueda anidar todo el amor que tengo para dar,
No te culpo por no amarme, porque en el corazón y el amor nadie puede mandar, así que siéntete libre de mi presencia, porque es mejor la ausencia que la indiferenci.