Vertiente cristalina de caricias
me impregnan de dulzura la piel,
presiento que no voy a resistirme,
al pecado lujurioso de tu miel.
El aire se torna tibio en derredor,
destellan nuestros cuerpos la pasión,
emanan nuestros poros el vapor,
que liberan el secreto de este amor.
Empapados de mil besos sin pudor,
entregados uno al otro sin final,
encendemos en cada roce el calor,
que nos lleva a amarnos sin piedad.
Rendidos nuestros cuerpos una vez más,
observo tu figura angelical,
la calma ha llegado a este volcán,
nuestros latidos se vuelven a serenar.
Te rodeo con mis brazos tiernamente,
me adormezco contemplando tu mirar,
no me sueltes quiero estar eternamente,
zambullida en tus caricias sin despertar.
_-_Muñekita_-_