En un reino, muy lejano, vivia una bella dama,
conocida como la princesa de la rosa encantada,
pues en su jardín florecian hermosas cada mañana
marchitando al caer la noche, sobre su morada.
Solo una permanecía abierta y espléndida al alba,
y brillante con el rocío, de la fría escarcha,
era su corazón, que en ella vivia reflejada,
pués su eterno amor, se la regaló con su alma.
Un día, no acudió a verla ni su caballo escuchaba
miraba hacia las colinas, pero no veia nada,
gritaba a los vientos, pero estos se callaban,
pasando así los meses, con tristeza y añoranza.
Una noche escuchó, que su amado, se casaba,
con una doncella, que los reinos,así lo mandaban,
el dolor fué intenso,y los llantos la embargaban
pero supo entender, que tal vez, no la amaba.
Nunca lo supo, y en su mundo se quedó atrapada,
con sus lágrimas regó su bella rosa adorada,
marchitándose sus días, junto con su roja espada
hasta el caer de la luna sobre su dulce espalda.
En el jardín, yacía una bella rosa y una dama,
eternizadas por un amor, reflejadas en las aguas
de los ojos de su amado,susurrando las palabras
Te quiero amor, mientras la luna se las llevaba.