Los que conocemos el secreto de las noches,
la magia de la oscuridad,
la mirada a tráves de una ventana,
mientras sonreimos a la noche estrellada.
Los que recordamos a solas,
sintiendo el aire de un recuerdo,
algo lejano perdido en la infancia,
la voz de un padre,
la mirada única de un hijo,
ó aquellos deseos adolescentes,
de música, amor y fragancia.
Los que vivimos cada dia,
con la ilusión de un primer dia,
cuándo ya tenemos tanto recorrido,
y seguimos soñando,
con desiertos de flores,
colores de otoño,
ó con descubrir nuevas sendas,
en el cuerpo de nuestra amada.
Los que salimos un dia del desamor,
y lo recordamos,
como un espejo aterido de luz,
y comenzamos de nuevo,
respirando perfumes de dias azules,
rocios de luz que emanan,
de una mirada que te ama.
Los que hemos escogido la vida,
y no nos paramos en rencores y lágrimas,
ni miradas hacia atrás que tanto desgarran.
Los que gastamos los pies,
contra las piedras del camino,
sin importarnos el sendero,
la llanura infinita,
la cuesta empinada.
Por mi, por vosotros, por ellos,
vale la pena la vida,
sonreirle a las nubes que pasan.