Eres como una flor nacida antes de tiempo,
profunda como el color rojo,
emocionante como perder el sentido,
de un amor de pasión,
como el que mueve los astros.
Te besaré,
hasta que te enciendas entera,
besaré tus labios,
tus pechos,
como si fueras un último paisaje,
con ese sabor a frescura,
que emerge de un murmullo,
de playa enamorada.
Palpitaremos juntos,
como el más profundo de los mares,
mientras te amo,
como una delicia vertiginosa,
y convertimos la nada en azul,
envuelta en nuestra memoria de ternura.
Y te besaré,
aspirando cada poro de tu piel,
como una colina ondulante,
como un pensamiento,
perdido en medio del universo,
como una mujer desnuda,
que esconde su esplendor,
entre sueños y olvido.