En este amanecer busqué tu encuentro;
estamos junto a este árbol, y será testigo
de lo que te confieso y de lo que te digo.
Que para decirte lo justo me concentro.
Estamos cerca pero no fluye mi palabra,
parezco mudo en hora de decirte mi verdad,
pero debo recitarte ahora es mí prioridad.
Diré; que en mi corazón amor para ti sobra.
Al cogerme la mano me siento mas seguro,
ya veo que contigo no estoy equivocado.
Aun no es suficiente lo que te he confesado,
sabré darte calor, seré hombre íntegro y puro.
Debajo de este gran árbol ya sentí tu abrigo,
no quedará como leyenda en él mi confesión,
a nuestro lapso de unión él dará protección;
tú mi amada, yo tu amado y también amigo.
Autor: Alcibíades Noceda Medina