Eres tú, mi único y gran amor platónico,
Que por tus labios se muda en antológico;
Al mirarte caminar, se vuelve atávico,
Y muy cerca tuyo se torna bucólico..
Pero que siempre me hace por ti suspirar.
Yo sé que mi silencio es poco pragmático,
Y que en tus brazos, podría ser muy estoíco;
Aveces debo comportarme muy escolástico,
Pues por decirte amor, me pongo frenético..
Pero frente a ti, no consigo nada musitar.
Asi que hago este esfuerzo titánico,
Y te escribo algo, al viento cantábrico;
Por que siempre serás, mi amor platónico,
Tal vez él te lo diga, y tú me puedas amar.