Dedico el tiempo a amarte,
a cubrir mi vida de recuerdos
y mirar al horizonte con esperanzas
de encontrar de nuevo tus besos.
Y escribo con sinceridad
en la madera de los árboles,
que ni la lluvia espante
mis letras de amor cada tarde.
Y es así como vivo cariño,
componiendo melodías
en el pentagrama de mi vida,
evocando la belleza de mi mundo,
de dónde vengo y donde iré algún día.
Y allí estaré en todos tus momentos,
deseando entrar en tus adentros
para allí verme morir de pasión
saboreando tus cómplices besos.
Y me quedaré por siempre
en la alborada de tus misterios
recitándote enamorados versos,
y cultivando los bellos sueños
que nos unen y nos dan esperanza.
Prometí amarte mi niña,
y aquí estoy muriendo de placer
pues no pretendo ser tan sólo bruma,
quiero ser. tu eterno querer.
Y perdón te pido por aquello
que surgió del amor que siento,
perdón por amarte con tanta intensidad,
perdón por llevarte tan adentro.
Pero aun así te quiero,
con mis defectos de hombre
mis sueños y mis misterios,
y te digo con alegría
que hoy es día de amarte,
como SERÁ mañana,
como SERÁ toda mi vida.