Mi vida cambió,
mi vida ya no es lo que era,
mi vida ahora merece la pena.
La mayoría de mis pensamientos han cambiado,
la visión volvió a no ser oscura,
y esta vez mejoró el paisaje.
Vivo bien,
sin dinero,
pero eso no importa.
Lo que importa es lo que eres,
no lo que has sido,
lo que importa es lo que vives,
no lo que has vivido,
lo importante es ser feliz.
Cuando la mierte llegue
podré estar orgulloso,
porque no soy como quieren que sea
sino como quiero ser,
porque puedo mejorar como persona,
porque lo mejor está por venir,
y cuando muera,
en mis últimas palabras,
quiero poder decir:
sí,fui feliz.