Cuando estés viniendo hacia mi,
y yo esté esperando por ti,
los recuerdos irán viajando,
tu palpitar acelerando.
Aguardándote cada una de mis caricias
y nuestra habitación con su mejor sonrisa.
De equipaje estarán tus miedos,
echarás tus últimos sueños;
tu piel con su aroma cubrirá el camino
y yo por fin dejaré de ser tu amigo.
Cuando estés aquí conmigo
tu talle será mi bendito alimento,
mi carne será tu abrigo,
se nos verá a los dos en el firmamento.
Tomaré el tesoro que hay en ti,
me esmeraré en hacerte feliz.
Cuando al fín estemos aquí juntos tú y yo,
tu calor y el mío se harán uno solo,
tu cansancio será mi cansancio,
el mundo girará más despacio,
mis labios serán de rosas
y habrán de volverte loca.
Cuando tus ojos me hayan visto
sabrás que no soy solo fantasía,
verás que de verdad existo
y que feliz soy de saberte mía.