Ven, te invito a soñar
un mundo, por venir, un risueño acontecer.
Es posible esperar que se haga realidad
un nuevo Paraguay…
El anhelo de una luz es la fuerza de atracción,
que te impulsa, juventud.
Es tu sueño trabajar, construir la novedad:
Bicentenario del país.
Ven, unamos nuestra voz y podremos entonar
un canto al amor.
Ven, pongamos nuestro afán y sabremos dibujar
la justicia y la paz.
Ven, elevemos por doquier la bandera tricolor
de bonanza y libertad.
Ven, -no te quedes por temor al fracaso, al qué dirán-,
construyamos la nación.
No mires hacia atrás: la inmensa oscuridad
te puede hacer temer;
pues, sólo podrás ver miseria y suciedad,
y la inseguridad…
Ven, soñemos lo mejor, es la hora de sentir
un nuevo amanecer;
despertemos de una vez y hagamos realidad
nuestro anhelo juvenil.
Ven, tenemos que avanzar por caminos de igualdad
en la oportunidad.
No podemos seguir más en esa situación,
en tanta corrupción.
Ven, debemos construir un proyecto de país
según el plan de Dios:
es el tiempo de vivir la fe y la hermandad
en nuestra sociedad.