Soy estaca...
De fiel madera, clavada
a mis suelos de
estirpes de mosquetero.
Sudo y mancillo,
profeso en cada acuerdo
una desiluciòn duradera,
invoco a los santos inocentes
crepuscularios innatos
sombras y luces
que gobiernan mi intolerancia.
Rìo de tus ansias...
Piedras que hacen cìrculos
en esas aguas, donde tu reflejo,
llega a mi occidente.
Octubres perfumados
de lirios y jazmines,
sangre de mi sangre
etèrea punciòn de
ciertas nimiedades...
Soy estaca...
Aferrada a mis recuerdos,
cual semejanza procaz
de mil pàjaros en vigilias,
llegamos justo a tiempo
donde nadie impuso
el calendario de una guerrilla,
donde la guerra pasò
y las heridas me devoran,
donde mi mar te acepta
perdida en mis nostalgias!