Abro mis ojos y me encuentro aquí,
donde todo es nada y mi nada es todo.
Donde en mi todo se encuentra solo la
nada de un corazón embelecido y herido
de un todo que fue nada, de un corazón
que duerme, que solo dierme y mientras
duerme, sueña con un todo, que hoy es nada;
sueña con despertar conciente para
dejar de soñar y mis sueños tocar.
Abro mis ojos y veo la inmesidad
de un todo que ilumina a este corazón
que despertó con esa luz que
no quiero que se vaya, que no quiero
que se apague, por que fuera de un mundo
de todo y nada lo es todo.
Que dentro de mi esa luz sea mi todo
hasta que mi corazón no vuelva
a dormir por nada.
Solo quiero ser para ti todo y nada,
y no quiero que tu dejes de ser para mí,
mi todo y mi nada,
por que esa maravillosa luz eres tú.
¿Donde estas que ya no escribes? ¡ dinos que ha sido de ti!, es quizas que no pecibes el vacio que hay aqui.