Noche serena, noche de esperas.
Yo te traigo la luna y las estrellas,
tus ojos son más bellas de todas ellas,
no es cumplido, te digo de veras.
Ahora abrazarte con amor impera,
y tu dulce beso en mis labios estalla,
mi explicación tu comprensión acalla.
Mujer, tu grandeza de amar me libera.
El aprendizaje de amar contigo
nunca termina. Amas lo que digo,
evalúas con sabiduría y certeza.
Juntos revivimos alegría en suspenso,
a tu lado mi júbilo es inmenso.
En tu persona hay amor y entereza.
Autor: Alcibíades Noceda Medina