( Leona herida lll )
Escóndete de mí, donde mi rabia
y mi decepción no te encuentren,
donde mis ojos no puedan fulminarte,
donde mi boca no intente devorarte,
donde mis manos no puedan alcanzarte
y en pleno corazón, con rabia, desgarrarte...
Escóndete de mí en la maleza de falsas emociones,
donde despeinas sueños y te inventas pasiones.
En el peñasco azul de tu mirada,
donde ocultas mentiras.
En el acantilado obscuro de tus besos
y de tu cruel perfidia...
Escóndete de mi al ocaso del día,
allí donde no puede alcanzar mi coraje
y entre tus silencios esconde el equipaje,
de falsos juramentos y de insidias...
Y cuídate muy bien, porque aún no conoces
a una Leona herida!...