Tu abrazo tierno necesito ahora ante de dormir,
tan tierno, como en otro tiempo me supiste dar,
como niño esperaba hoy te vuelvo a recordar
Debo olvidar, no merezco pero no puedo asumir.
Se bien lo que tiempo ha hecho de este amor nuestro.
Quien soy para seguir exigiendo tu voluntad,
los besos de buena noche ya quedan en nimiedad.
Aislado estoy disperso en un rincón del camastro.
Pero tu no sabe cuanto yo daría por un te quiero,
cuan contento se pondría este mi corazón paciente,
que espera una hermosa mañana un día cuando despierte.
Aun te amo, es la razón que estoy contigo y no te libero,
este desazón del momento nos carcome hasta el alma.
Después de esta tormenta ansió limpido cielo en calma.