Quiero brindar por la dicha,
de pensar y de vivir,
porque las rosas de abril,
aromen mi poesía.
Porque dure la alegría,
brindo con mi copa en alto,
por todo ser, negro o blanco,
que tiene sangre y respira.
Es más hermosa la vida,
si sabemos compartir,
con el hermano infelíz,
un poco de nuestra dicha.
Brindar con una sonrisa
el calor de nuestra mano,
a todo el que anda herrado,
por las sendas de la vida.
La navidad es la cima
de ese sentimiento hermoso,
porque es de alegría y gozo,
unirnos todos en familia.
Tener guardada una silla,
en la mesa familiar,
y, compartir nuestro pan
con el que lo necesita.
Autor: Valentín Rodríguez