Tengo el corazón partido,
por mas que quiera,
por más que lo intente,
a éste, nuestro amor,
no consigo encontrarle sabor.
Llevo temerosa carga conmigo,
y me asusta,
es tan pesada que duele,
y aunque lo desee,
no puedo hacer nada.
Siento que estoy creando
una falsa ilusión
y estoy segura:
no le daré emoción.
Sabes?
Es mejor dejar lo vivido
y esperar otra ocasión
para darle reconciliación.
Olvidemos este amor
y mañana,
-cuando la tormenta esté calma-
-cuando vuelva a latir mi corazón-
te haré la pregunta en cuestión:
En tu alma
aún existo yo? Kintal