FUGA... DE TI

Déjame soñar ahora
que mañana ya es muy tarde,
se me platearán las sienes
y no habrá quién me reclame.
Déjame sentir que vivo
aún entre mis propias manos,
porque no tendré paciencia
al saber que espero en vano.
Déjame salir de esta burbuja
que me asfixia y desespera,
se me secarán las penas
y en mi jardín las verbenas.
Déjame viajar serena
en mi carroza de plata,
que me regaló la lluvia
en las horas más largas.
Déjame alcanzar las cumbres
donde reinan las hadas,
y sentirme como ellas
con mi falda estrellada.
Déjame tocar la luna
cual caricia anhelada,
y contarle de cerca
que es la musa hechizada.
Déjame pasar estrellas
más allá si pudiera,
que mis sueños me lleven
donde nunca volviera.
01.11.93