Tu estampa simula,
ser volcada sobre la playa.
Desde las profundidades del mar,
la espuma bañó tu cuerpo
que reluce como azabache
en las calmas arenas.
Tienes como manto un diáfano cielo;
tan celeste, como el infinito…
Corpulento, brioso, divino bagual:
eres un bravo adonis
que embellece ese lugar.
Tu largo cuello musculoso
con hermosas y largas crines,
enarbolan tu esbelta cabeza;
escuchando el canto de las sirenas…
Esos ojos las contemplan
orgullosos y altivos en la serena mar…
Trota, brinca, emerge de la costa,
llevando contigo los vientos
en tu galope sin igual,
un relincho anuncia tu paso
vibrante de cadencia y admiración…
¡Oh corcel azabache!
Eres el alma de una postal…
El sol te ilumina con fuerzas;
para que no detengas tu andar… Mecha Foderé