He abierto mis ojos a este jueves,
que cual página en blanco
me entregó la mañana,
para que yo lo llene
con mis ensueños,
para que yo lo escriba
con mi alma.
¿Qué consignaré en ella este día?
¿Cuántos gestos de amor
la harán hermosa?
¿Cuántos habrá de odio que la manchen?
¿Qúé cosa me dirá cuando la lea
si es que llego con vida
al final de la tarde.
Voy a escribirla entonces lentamente,
saboreando las letras, las palabras,
colmándolas de amor en cada rasgo,
haciéndolas sentidas y espontáneas.
Que mi sentimiento sea honrado,
que la bondad me dicte cada frase,
que tengan claridad y transparencia
para que si alguien lee
la hoja de este jueves
pueda decir mi nombre mansamente,
llevarme en su recuerdo con afecto,
que si la muerte aparece de improviso
convierta este día y esta página
en la última sombra de mi aliento.