SÓLO YO Y TU SOMBRA

Si solamente una noche, mientras en mis sueños te estuve pensando, y cuando en la distancia la luna parecía espiarnos y las estrellas en el cielo comenzaban a murmurar, hubiese asomado tu voz cómo un débil eco que a lo lejos se confunde con el viento y el silencio, nada existiría ahora, ni materia ni números, ni astros, ni siglos, nada. Nada como lo conozco; el tiempo con su medida, las cosas y sus formas, y los espacios y los límites; no habrían palabras ni letras, ni signos, olvidados quedarían los versos, las flores, la historia, el mar, la luz, el día, (todo el pasado sería nuestro). Sí solamente una noche me llamaras desde ti, cuando te estuve pensando, sólo yo tendría tu sombra. .