Cuando sientas latir en lo profundo
Una fuerza preciosa que te alienta
Un calor superior, será tu mundo,
Que te anime, te ame y te consienta.
Una voz desconocida que te abrase
Una luz formidable que presientas
Hallarás fresco y verde en el estiaje
Un espíritu de ensueño que sientas
La mañana en su ensueño prodigioso
El fulgor de una tarde muy nublada
La agonía de un ayer nada fecundo
O la gloria de un hoy que se hace nada
.
Palpitar en la mirada de un mendigo
Una luz, una esperanza, una sonrisa
Optimismo que genial viaje contigo
A pesar de ser harapos tu camisa.
La lluvia, el sol, o el frío inclemente
La miseria, la riqueza, el abandono
La locura, o lo genial ahí en tu mente
La desidia, lo gentil y hasta el encono.
Aceptar con la magia de lo adverso
Lo monstruoso de una luz maravillosa
Encontrar en la locura de algún verso
La cordura magistral de alguna prosa.
¡Eso es algo parecido al Dios Divino
Todo eso y mucho más es el Creador
Es tu hijo que sonriente en el camino
Es el puente que te llevará ante Dios!
Poza Rica, Ver., 9 de Octubre de 2007.
Antonio Reyes Patiño
Periodista pozarricense
Inútil tratar de describir a Dios, pero en el intento, tal vez alguna rima pueda brillar en medio de mi humildad infinita