¿Sabe usted, señor?
¡Lo necesito!
Quisiera que todo fuera diferente,
poder darle un abrazo así... tiernito,
y quedar en ese instante para siempre.
¿Sabe usted, señor?
Me están haciendo falta,
esos mimos que intuyo son deleite,
de sentirnos tan cerca y tan juntos,
de vivir la vida entera, lo que queda,
sabiendo que hay milagros verdaderos,
que nada ha sido en vano, sino justo.
Mi Señor...
¡No dejes de soñar que existe un nuevo mundo!
¿Sabe usted, señor?
Me están haciendo falta sus caricias,
que las vislumbro, suaves, tibias,
tan iguales a las que necesito.
¿Sabe usted, señor?
Me estoy enamorando sin remedio,
y sé que en su interior,
lleva mis besos, grabados a fuego.
¿Qué le parece si nos entregamos al amor?
Elsa Fariña
21-01-05