Ha estallado una rebelión en mis adentros,
La luz se deja ver desde todos mis infiernos,
Es pura y sincera como los llantos más tiernos,
¡Verdadera! lo presiento, en su boca un par de versos.
Es el querer lo que me incita a querer llegar más lejos,
Sus latidos y sonrisas del tirón, barren mis miedos,
Ahora quiero que te acerques, y pruebes todos mis sueños,
Ver tú y yo como le crecen las flores a los almendros.
Y que no haya más que el viento, removientote los pelos,
Y dar bien por supuesto que el frió pertenece a los eneros,
Y reivindicar por escrito a los dioses, oleadas de silencios,
Para escuchar nuestro amor, como sube de la tierra a los cielos.