Sé que estás por ahí. Casi te veo,
aunque más que mirarte te presiento.
Eres parte de mí, del pensamiento
donde a veces contigo me recreo.
Sé que estás por ahí. Lo sé, lo creo
y te puedo tocar, sentir tu aliento.
Soy un hombre feliz, estoy contento
cuando ves mis poemas y te leo...
Muchas gracias, amor, por comentarme,
por tu voto de fe, por tu suspiro
que recorre mis venas, sedentario.
No te atrevas jamás a abandonarme
porque muero sin ti, porque deliro,
porque gimo con llanto milenario...
Heriberto Bravo Bravo SS.CC