A llegado nuevamente a mi ventana la luz radiante del sol,
la aurora y su mañana me han besado dándole a mi vida sabor,
que bendito soy al despertar y tener un nuevo día para vivir,
y ver las estaciones del año l.legar y después verlas partir.
Vuelven las aves a hacer sus nidos alrededor de mi hogar,
regresaron a dar calor y abrigo, y a sus polluelos crear,
vuelven los arboles con sus frutos y las flores a florecer,
regresaron a dar color y perfume, y a mi huerto embellecer.
Vuelven las estrellas a iluminar y la luna llena a señorear,
regresaron a dar luz y esperanza, y por las noches soñar,
vuelven las brisas frescas del otoño y las hojas a caer,
se van para dar cabida al frio invierno, a la lluvia y nieve.
Que hermosa es la vida, siempre hay un mañana y un ayer,
siempre hay un hola y un adiós, una despedida y un volver,
Inmigrante soy, viajo con el viento y las nubes del atardecer,
siempre soñando con regresar al lindo país que me vio nacer.
Ayer regrese a mi tierra y comprendí que no era mi hogar,
Dios tiene una mansión para mí que algún día debo de llegar,
volteo las hojas del calendario viendo las estaciones pasar,
y con paciencia espero ese gran día cuando deba regresar.
Hoy vivo feliz, viendo por la ventana la luz radiante del sol,
la aurora y su mañana me han besado dándole a mi vida sabor.
(Poema escrito por Maximiliano Guerra, USA 2005)