Dormida en los recuerdos he quedado...
El futuro ya no existe,
es tan solo una quimera.
Solo los recuerdos que anidan mi mente
me mantienen viva como ayer.
Yo no vivo el presente,
solo transito mi camino
con los ojos abiertos y la mente dormida.
No existe para mí la rutina,
ni programo lo que he de hacer.
Mañana tan solo será otro día,
sin sol, sin nubes, sin nada.
El hoy es un devenir de cosas sin apuros.
Nada es importante,
nada es porvenir.
Tantos años he vivido
que mi cuerpo se ha quebrado.
Ayer...
Tan solo el ayer está en mi.
Los recuerdos serpentean,
rondan mi cuerpo como fantasmas de seda.
Envuelven mi interior con caricias de ensueño
y en intima música profundamente sueño.
Sonrisas con sonidos de campanas,
perfumes de flores
que tan solo crecen en mi alma,
tibiamente me protegen del frío del mañana. Estela Foderé