Desde la cumbre de mi alma pienso!
me asombro,de impotencia,de despecho,
hasta que la Hostia Santa me revela,
extinguiendose lenta en el altar de mi pecho,
como invalida de fe y de huracan castigada
Camino en legiones de suelo roto!
con una mañana que no conoce la aurora,
en remolino de montaña,en rayos que baña
en una sombra de nieve y cuarzo,
donde el color se conoce,ni puro,ni blanco
Cruje la tierra,cuando golpean las rocas!
y el fuego,se pasea en las llameante fosa,
me adelanto,me antojo de un pensamiento insano,
de un precipicio y un grito en alto
Bajo los antojos de los lirios rojos!
y el cielo que bendice con sus puritanos ojos,
te enseño las heridas que saltan como espina y rosas,
y en rubi de mi sangre en la primavera germina!
Raul T