No digas. Haz.

Jesús, me estás oyendo
Pero te callas.
¿Qué me quieres decir con Tu Silencio?.
Te estoy diciendo
Que no te salvarás por lo que digas.
Sólo te salvarás por lo que hagas.
Te estoy diciendo
Que una Buena Acción
Para Mi valdrá más que mil Palabras.
Te estoy diciendo
Que me pruebes que me amas
Por lo que estés haciendo
En favor de Otras Almas
De Amor necesitadas.
Te estoy diciendo
Que a quien se haga de más
Le haré de menos.
Y a quien se haga de menos
La haré de más.
Te estoy diciendo
Que ensalzaré al Humilde
Y humillaré al Soberbio.
Te estoy diciendo
Que al que Perdón me pide
Siempre le absuelvo
Y al Fariseo e Hipócrita,
Siempre condeno.
Te estoy diciendo
Lo que debes hacer
Si te quieres salvar,
Porque sólo salvarte
Te deberá importar.
Te estoy diciendo
Que al final de los siglos
Todo lo habrá ganado el que salve.
Todo lo habrá perdido
El que se condenase.
Pero si por salvarte
Tú nada haces,
Yo, que todo lo puedo,
No te podré salvar,
Porque cuando te di tu Libertad
Me obligué a no obligarte.
Me obligué a respetar tu Voluntad
De su Poder privándole a la mía.
Te estoy diciendo
Que cuando te creé
Ligado quedé a ti.
Ligado a Mi quedaste.
Hice de ti mi Hijo
Hice de Mí Tu Padre
No podía, por tanto, ser Tu Amo.
No podías, por tanto,
Ser Mi Esclavo.
Sólo amarte podía como a un Hijo.
Sólo amarme debías, como a un Padre.
Nuestro Amor, a los dos,
Así nos lo exigía.
Yo con Mi Amor cumplí.
Tú con el tuyo, no.
E imitando a Satán
Te rebelaste.
Mas fue mi Amor tan grande
Que Hombre me hice en Mi Hijo
Para en El redimirte y perdonarte.