Tarde en que pudimos decirnos adiós, bastó el último desdén,
se desnudo la realidad, entonces inútil alegar a aquellos hastío,
y seguir ocultando la verdad ni argüir o ensayar sermones vacío,
los espectros fueron absolutorios, ya ninguno se sorprenden.
El común denominador ha quedado sin sentido en apatía total,
se invirtieron los papeles, desmesuradamente ahora tus palabras
llovieron sobre mí, y la perversidad siempre agobio en de sobra,
olvidé todos hasta la costumbre de tu cuerpo, a la cuenta el final.
En tus ojos ya no pude ver nostalgia ni siquiera brillo de esperanza,
ya es nada lo que era todo, solo busca recurso o refugio al temporal,
talvez abrigarse en el presente, esta trama desleal se vuelve amoral.
Cuanto lo ciento, sucedió lo inesperado me sucumbe la tristeza,
cae el telón escena desierta, vacío como cuerpo sin alma en desvarío,
concluyo la comedia, los protagonistas en la senda arrumba al calvario.