Duende del otoño, constante y travieso
vagas esos sueños que alcanzan la gloria,
te escudas en corceles, espías cada beso
recorres amplitudes, husmeas mis historias.
Duende del otoño, que callado te sinceras
me llenas de preguntas, alivias mis respuestas
cobijas la llegada de cada primavera
inventas cuentos sabios con el sol en cada puesta.
Duende del otoño, pernoctas fantasías
arremetes juglares en cantos inocentes,
prometes la noche y me devuelves los días
velas inquietudes, juegas con mi mente.
Duende del otoño, pacífico y silente
devuelves a mi vida la magia de un momento,
te vas sin que expulsen, mezclas ingredientes
sabes que te extraño, sabes mis recuerdos.
Duende del otoño, de lluvias y misterios
despides la inquietud que abriga mi silencio,
y en la paz sinuosa que precede inviernos
transitas mi alma, sabes mis recuerdos.