Se te estropea el embrague del coche,
tu hijo necesita unos zapatos nuevos,
en tu nevera no entran ni cucarachas,
discutes cada noche con tu mujer,
maldices ese trabajo esporádico mal pagado,
las facturas sin pagar se amontonan,
la sombra del desahucio te persigue,
te estás quedando calvo,
estás engordando,
alrededor de tus ojos tristes
se multiplican las arrugas,
eso del orgullo te suena ya a chiste,
esa muela picada te está torturando,
pero no puedes permitirte sacarla,
tendrías que hacerlo como Tom Hanks en Náufrago,
cada día pareces vivir el mismo día,
como Bill Murray en El día de la marmota. . .
Te queda el whisky barato,
algo de música,
hacer el "amor" de cuando en cuando
con esa mujer que ya no te quiere,
que casi odia ver tu trasero rechoncho,
te queda poco en este mundo
y lo poco que te queda
lo vas a desaprovechar
o a sumergirlo en un pozo sin fondo,
no tienes de que preocuparte,
muchos comparten tu misma suerte.
Pobre criatura
presa en las garras del tiempo
por la cual la dama justicia
rompió su balanza
y en su lugar sostiene un látigo
con el que a la muy miserable
le encanta fustigarte. . .
No tienes de que preocuparte,
ya va quedando menos. . .