Si yo fuera un niño amor mío,
no dejaría de pasar un minuto,
del día sin jugar y sin perderme,
en tu cuerpo, ese hermoso
cuerpo tuyo que ansío.
Quiero sonreír cada mañana,
cuando en la cama despierte,
cada amanecer sin preocuparme y
que me dejes buscar los tesoros,
de tu cuerpo mas ocultos en libertad y cambiar el destino de tu corazón,
con mi amor y mi pensar.
Si yo fuera el hombre que tú deseas,
tener a tu lado no cambiaría a
la mujer que amo, por flor de un día.
Con mis caricias, mis miradas,
sobre tu cuerpo desnudo,
solo tengo deseos de poder explorar,
tu más deliciosas ensenadas que,
esconden tu sexo.
No pensaría en los que haceros,
en tu cuerpo, ni temería la adversidad,
porque con el amor buscaría los, tesoros más sensuales que, escondes en las entrepiernas,
que mi alma daría media vida,
por poder apagar mí sed de amor,
con tus néctares mas dulces de,
mujer que emanan por tus tesoros.
Toda mi boca llenaría al pasar mí,
alocada lengua lamiendo tus jugos,
mas seductores que afloren por,
tu ansiada y deseada vagina,
que cuando me reclino sobre ella,
sintiendo sus aromas me vuelvo,
loco por poder amarte con ansias.