Hoy tengo la necesidad de decirte,
lo que me inquieta, lo que me afecta, lo que tú bien conoces.
Hoy, parece mentira, pero afloran miedos escondidos.
Algo inquieta mi razón
y aunque no puedo descifrar,
se que es algo trascendental,
que debo reorganizar.
Y porque no decirlo, lo grito desde luego,
revisaré mi interior y me pondre un vestido nuevo.
Si crees que no me atrevo,
te confieso que no es fácil,
pero de tropiezo en tropiezo,
pongo en orden mis ideas,
y aunque tu no me lo creas,
descubriré mi humilde interior
y te lo presentaré en fases.
Ahí va la primera,
con respeto y tezón,
tengo un gran corazón,
lleno de dulzura y calor,
que traslado donde quiera,
sin miedo, temor ni flojera,
sin límites y sin fronteras.
La segunda te la digo
y no la vuelvo a repetir,
lo mío es dar cariño,
agradecimiento y compartir.
Y ahora por último, desnudo lo que hay en mi interior,
una cosa muy bonita y de mucho valor,
que se escapa por doquiera
y grita en alta voz,
déjame salir para dar al mundo lo mejor,
soy el corazón y quiero volar, soñar y compartir
y nunca nunca dejar de latir.