No te escondas de mí, dame tus ansias,
remójame los labios con tus besos,
se me agotan las fuerzas, se me vá la esperanza
cuando te encuentras lejos...
Es esta soledad que hoy me acompaña
la que mal aconseja al corazón,
porque sabe lo mucho que te extraña
y le dice que olvidas mi pasión...
Demuèstrale que no, que aún me amas,
que tu silencio es solo pasajero,
que aún sigue encendida nuestra llama,
que Tú sabes lo mucho que te quiero...
Mi cuerpo tiembla ahora, y no hace frío,
será quizás temor o desconsuelo.
Quiero sentirte Amor, dí que eres mío.
Ven ya mi Amor, Tú sabes que te espero...