Te has dado cuenta
lo que de mi has hecho?
un mar en tus cálidos
y arrebatados excesos,
el equinoccio fugaz
de tus perfectos extrechos,
la vigilia de pensarte
sobre una calma profana,
el devolverte en mi cama
lo que me das por amarte,
la voz de una estancia
en mis campos de hierbas,
con la perpetua fragancia
de lo que todo me dejas,
el apocalípsis silente
de un puñado de certezas,
aquello que no se expresa
con palabras inteligentes,
la humedad de tus tejidos
que en mi piel se desperezan,
contando cada latido
sin saber que lo merezcan,
el humo de mis abriles
impregnado de tu paciencia,
la lucidez de cada secuencia
iluminada por tus candiles,
y al honor de saberte mía
cuando a mi cuerpo embelesas
sabrás que a cada palabra besas
esas regiones tan escondidas,
y si has hecho de mi
este obrero de tus razones,
estarás tan dentro en mi vida
que no habrá traba permitida
que impedirá
vestirte con mis pasiones.